P. Jorge González Guadalix
Compartimos este impecable post del P. Jorge. ¡Que Dios nos dé la gracia de poder imitar la valentía de estos Cardenales!
Todo un bombazo la carta que han hecho pública hace unos días los Cardenales Burke, Brandmuller, Cafarra y Meisner. Según cuentan ellos mismos, preocupados por la confusión que observan en el pueblo de Dios tras la publicación de “Amoris Laetitia”, se han dirigido al santo padre pidiendo aclaración para las cuestiones más controvertidas, especialmente el capítulo octavo de la exhortación apostólica. Tras dos meses de esperar respuesta en vano, decidieron trasladar la carta al pueblo de Dios.
Me parece que están en su derecho y obligación. Como cardenales tienen una especial responsabilidad a la hora de colaborar con el santo padre y se han sentido en la necesidad de hacerlo. En corto y por derecho, que dirían los taurinos. Dando la cara, sabiendo que se la partirían desde muchos lugares. Una carta escrita y firmada. Sin complejos.
Bien sabían ellos lo que se les venía encima, y aun sabiéndolo, carta enviada, firmada, rubricada y con todos sus sellos. De todo menos bonitos: traidores, escribas y fariseos vestidos de púrpura, dinamitadores de pontificado, ultraconservadores que arremeten contra Francisco. Todavía no he visto que los llamen fascistas. No habrán caído en la cuenta.
Cuando uno no entiende algo, y más si es un cardenal de la Iglesia, lo que tiene que hacer es decir, con luz, taquígrafos, firma y sello, justo que no lo entiende, y pedir a quien puede explicarlo, el santo padre, que lo explique, que de momento llevamos dos meses y rien de rien.