Actriz mexicana agradece acogida de obra teatral que defiende a no nacidos
MÉXICO D.F., 14 Jul. 10 (ACI).- La actriz Laura Zapata destacó la acogida del público a la obra teatral "Vida por amor", que narra la conversión del rey del aborto, Bernard Nathanson, y que pese a haber sido representada una vez, ya recibió propuestas para llevarla a España.
"El público encuentra algo que no se espera. Comentan que es una obra conmovedora; solamente hemos dado una función y con ésta función ha producido grandes cosas en México; puedo decir que lo que ha producido ha sido por obra del Señor", declaró la actriz a la semanario Desde la Fe.
"Vida por amor" narra la conversión de Bernard Nathanson y Norma McCorvey, abortistas arrepentidos y ahora defensores de la vida. Nathanson, médico de profesión, practicó personalmente en Estados Unidos cinco mil abortos, incluido el de su propio hijo, y supervisó la realización de otros 70 mil; McCorvey, demandó el derecho al aborto en el mismo país y consiguió despenalizarlo.
Zapata manifestó su sorpresa por la acogida de la obra, ya que no la hizo pensando en el éxito, "sino porque quería y alguien tenía que hablar de esto. Porque no me parece que a los jóvenes les inviten a creer que el embarazo es un problema, donde se les invita a abortar como si fueran a hacerse manicure. Alguien tenía que decir qué es realmente el aborto".
La obra fue estrenada en el Teatro de la Ciudad en Chihuahua y ahora la actriz está buscando teatros en el DF y quizá llevarla a escuelas, universidades, colegios, preparatorias, "donde los jóvenes puedan verla, porque ellos tienen que recapacitar en el concepto de la vida, de proteger a lo más débil del género humano".
Laura Zapata recuerda que el día de la despenalización del aborto en el DF, estaba reunida con unos colegas y en un arrebato súbito exclamó "¡cómo es posible que viva en un lugar donde está prohibido fumar pero está permitido abortar!".
"La idea le metió mucho ruido a mi cabeza. De inmediato, allí pensé: ¡quiero hacer una obra que hable del aborto! Fue algo sin pensarlo, un deseo que nace del alma, del espíritu, que viene de otro lado del ser", relató.
Explicó que Nathanson y McCorvey "nos llevan por el satánico mundo del aborto hasta su conversión; ellos viven esa conversión espiritual transitando por caminos del alcoholismo, drogadicción, libros de autoayuda, psicoanálisis, intentos de suicidio".
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